Viajar: el mejor maestro para soft skills incluye un pasaporte
- Claudia Salas Bozich
- 14 may
- 3 Min. de lectura
Actualizado: 18 ago
Tuve la fortuna de tener una familia que me llevaba de viaje. Recuerdo cuando de niña viajaba de Venezuela a los Estados Unidos y mi shock cultural de ver que las casas no tenían cercados ni rejas, o que los paquetes de correos eran colocados en las puertas de las casas. Cuando tenía 15 años fui por primera vez a Europea y recuerdo mi impacto de Londres: con sus buses rojos y la gente colocada muy ordenadamente en el lado de la escalera mecánica. Para una chica que venía de Venezuela ¡esto era otro nivel!
Desde mis 21 años empecé a viajar cada vez más a distintos países y culturas. Y algo de lo que no había caído en cuenta, era de lo MUCHO que desarrollaban mis competencias y habilidades; pero lo más valioso es cómo me ha ayudado a crecer personalmente.
¿Quieres desarrollar competencias? Viaja
Cuando viajas mejoras tu HACER:
....debes trabajar en tu toma de decisiones una y otra vez
....tienes que abrir tu mente para aceptar otras formas de ver el mundo
.... hay que escuchar activamente el entorno, a las personas... para entender cómo comportarte
.... toca dejar a un lado "tus formas" y adaptarte: al país que fueres haz lo que vieres.
.... hay que comunicarse asertivamente según lo que es asertivo allí
....empatizas de forma profunda con otros seres humanos como tú que, aunque tengan otra cultura, tienen miedos y sueños como tú.
.... si vas con un grupo, trabajas en equipo y aprendes a colaborar
.... si vas solo, pues ¡también te toca interactuar! pues hay que resolver los problemas
...¿Asia? ¿Medio Oriente? prepárate para entrenar tus dotes para negociar.
... aprendes a ser más responsable ¿te quedaste dormido el día de tu vuelo? pues asume las consecuencias.
...tienes que gestionar todo tipo de emociones: sorpresas en los destinos, alegrías en lugares increíbles, rabietas con la aerolínea...
... desarrollas tu creatividad, viendo estilos distintos de hacer las cosas.
Pero viajar también transforma tu SER:
....agradeces, porque te das cuenta de lo afortunado que puedes ser.
.... si vas contigo mismo, te conoces más y desarrollas autoconciencia
.... y si vas con otros también: te harán espejo y aprenderás de ti a través de los demás.
.... aprendes lo que es importante realmente para ti ¿prefieres caminar y comer un sandwich que el turismo de lujo? todos los estilos son válidos pero aprendes qué cosas resuenan contigo.
... te escuchas más a ti mism@: sientes tu intuición (como cuando estás en China no entiendes NADA de los anuncios, y usas tu inteligencia intuitiva para cumplir tu misión).
... no todo lo que brilla es oro; te vuelves tu mejor compañero en esos momentos difíciles (como cuando te rebotan de un país por ser venezolano y te quedas en el terminal sin saber qué hacer).
... abrazas la presencia plena: ese momento no volverá más nunca. Admira, recibe y contempla.
...toca ser más valiente (bueno ya pagué por estar aquí... ¿por qué no montarme en esa montaña rusa que se ve tan fea? :) )
... tu ego se viene abajo; tu mundo no es superior al de los demás.
...descubres patrones y creencias tuyas que dabas por hecho.
Si además hablamos de un viaje formativo, con la intención de desarrollarte ¡imagina lo que puedes evolucionar!
¿A ti qué lecciones te ha dado el viajar?
Claudia Salas Bozich
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